martes, 8 de octubre de 2013

Reseña: Evil Dead


Título: Evil Dead 
Año: 2013 
País: Estados Unidos 
Dirección: Fede Álvarez 
Género: Terror, Gore, Remake

Sinopsis: “Cinco amigos se alojan en una cabaña de Tenessee para así poder ayudar a una de los jóvenes, que se encuentra en rehabilitación por drogas. Estar sin sus drogas convierte a la chica en una persona agresiva, lo que llevará a sus amigos a no darse cuenta de que en realidad esta poseída por demonios que fueron desatados al leer el Necromicon...” 

Opinión personal: He de decir, primeramente, que ODIO las posesiones (quedé traumada con El Exorcista y desde entonces no puedo con las niñas poseídas). 

También he de puntualizar que no he visto el clásico de Sam Raimi, del cual viene el remake del mismo nombre “Evil Dead”, así que no voy a poder compararla con la antigua. 

Poseídas. Poseídas por todas partes. Mi pesadilla hecha película (y no, no estoy exagerando). 


La idea de la muchacha adicta a las drogas es buena, pues aun estando poseída, el demonio puede pasar totalmente inadvertido entre sus compañeros, pues toman sus extrañas conductas como consecuencia del “mono” que ella experimenta. 

Ahí es cuando empieza el horror dentro de la cabaña (y cuando la gente sensible debe taparse los ojos para no ver el resto del film) y las posesiones empiezan a estar a la orden del día, siendo cada una más grotesca que la anterior (aunque, todo hay que decirlo, son debidas a la actitud demasiado inocente de sus protagonistas). 

Sangre, desmembramientos, puñaladas, golpetazos… Todo está permitido y si bien cuando crees que has visto suficiente, no te preocupes que hay más! Jajaja 


El maquillaje es una auténtica pasada, todo hay que decirlo, pues se limitaron a hacerlo más a la antigua usanza y prescindir en todo lo que se pudiese del CGI, cosa que se agradece hoy en día porque muchas películas abusan de la tecnología intentando ser lo más realistas posibles y consiguen el efecto contrario. Las posesiones muy logradas y los efectos sangrientos de heridas, cortes, etc., increíbles también. 

Pese a no haber visto el clásico, he de decir que esta película me ha gustado más de lo que esperaba, pues el argumento es original y no se hace pesado en ningún momento (tiene incluso toques de comedia) y, por lo menos a mí, la sangre no me molesta. 


He de destacar la escena del final, aunque ya veréis por qué si os animáis a ver la película. 


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